Ser adolescente, tus padres te prohíbe salir o llegar a cierta hora, o simplemente no te deja salir. Soy esas que se quedaba en casa siempre después de la escuela. Es malo encerrarte siempre en casa. Te deprimes, no tienes vida social, no tienes amigas para conversar y compartir chismes de la fama... después llegó el internet. Donde está todo, consigues todo, ves todo, conoces todo y hasta experimentas todo. Mi vida adolescente era en MSN.
Ya que no te dejan salir, no tienes amigos. Conoces uno por internet. Es muy lindo, te enamoras y te vuelves loca... con el tiempo descubres que no eres suficiente hermosa para él. Porque aquel tiempo Megan Fox era un boom para los hombres y querías ser como ella para que él se fijara más en ti y para que dejara de hablar sobre ella y empezará a comentar sobre tu cuerpo.
Así fue, empiezas a comer menos. Pero al día siguiente tienes mucha hambre, comes más de lo que solías comer y luego te sientes gorda y asquerosa. Sabes que tenías que sacar todo lo que comiste o sino la comida se quedaría dentro y te quedarás gorda. Con tu varita mágica, el cepillo de dientes, lo hundes dentro de tu boca, detrás de la lengua y ¡abracadabra! sale todo.
Encuentras en una revista hablar sobre la anorexia y bulimia casualmente. Una escritora argentina cuenta su historia en un libro y te interesó saber más sobre eso. Nunca supiste que lo que hacías tenía un nombre hasta que leíste el libro. Entraste al internet y te bajaste el libro completo (pirata), te la leíste todo en dos días y medio. Te encantó y quisiste ser como ella. Encontraste amigas que leen el libro compartían sus vidas anorexicas y bulimicas... y fuiste más profundo con el tema.
Ya él no te escribía demasiado, te obsesionas y lo único que querías es llamarle la atención, asi que seguiste, vomitabas lo poco que comías, dejabas de cenar, tomabas laxantes, hacías ejercicio mas de 2 horas compulsivamente hasta que te dolían las costillas y llorabas todas las noches porque no podías moverte del dolor...
Solías pesar 145 lbs y ese momento pesabas 114 lbs. en solo un mes. Estabas muy entusiasmada por el logro hasta que querías bajar más porque te hacía feliz..
Creaste un perfil privado con un nombre desconocido para agregar a tus amigas anorexicas y bulimicas. Tus amigas de la red te adoraban porque bajaste de peso rápido, porque eres manipuladora con ellas, te gustaba que se sintieran envidiosas para que hicieran lo mismo que yo, buscabas a niñas gordas para que se unieran contigo y fuera bella...
Estaba enferma y obsesionada con mi cuerpo, no había otra manera de quitar mi depresión hasta que te conocí, pensé que me salvaste pero mi obsesión seguía constante, y todo lo que sentía era ira, dolor, envidia, odio, obsesión, desesperación... que hasta un punto no me soportabas y me puse peor, te enojabas conmigo por mi actitud que llegabas a no hablarme, estaba muy triste y enojada, y lo peor era cuando veía que hablabas con otras, me puse muy celosa, celosa y enojada que te dije "ahora ya no me das bolas?" y de ahí discutíamos, y no entendías, pero yo nunca explique mi actitud, nunca sabía porqué actuaba de esa manera, simplemente me enojaba y odiaba mi vida ordinaria y me daba mucha envidia ver tus fotos cómo pasabas tu vida y la mía era lo contrario.
Seguía vomitando, haciendo ejercicios constantes todos los días después de salir del colegio, botaba mi desayuno o se lo regalaba a mis amigas para no comer, quitaba mi apetito comiendo 5 limones al día. Quería verme hermosa, más hermosa y delgada que las otras chicas que conoces. Te lo mostraba, quería enseñarte lo que me esforcé haciendo para que te fijaras en mí, cada parte de mi cuerpo.
...No podía creer la distancia y el tiempo que estuve obsesionadamente loca por tí, hasta un punto que me dije "ya no más" y si fui culpable de algunos de tus sentimientos o actos que has tenido, losiento mucho por mi actitud.
Quiero que sepas que ERES mi primer amor. Y cada año y meses, algún detalle de mi vida me acuerdo de ti, no me arrepiento haberte conocido, tal vez tu si, lo que recuerdo la última vez que hablamos. No me odies.
P.D.: Escribí como si estuviera hablando de dos personas, pero enrealidad se trata de mí. Tengo dos personas.
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